Hace algunos años invertí una cantidad de dinero relevante para mi en esa época, en una compañía china que finalmente era piramidal, prometía grandes retornos a través del reclutamiento de más y más personas que creyeran en la promesa de cambiar dramáticamente sus vidas y tener una vida paradisíaca con ingresos jamás soñados. Resolvimos con mi mujer meternos en ese “negocio” el cual al cabo de pocos meses, nos hizo perder toda la inversion realizada y recién ver con claridad la fantasiosa y manipuladora forma en que las personas que montan este tipo de empresas manejan en su discurso y en su actuar. No lo veía. El cautivador discurso que normalmente las personas que dirigen este tipo de compañías tienen y mi desesperada esperanza de “volverme mágicamente millonario” eran más fuertes.
Era una ilusión creada en mi mente alimentada por inescrupulosos que tienen como negocio la ambición desmedida de los seres humanos. No me refiero a prestigiosas compañías de multinivel como Oriflame u otras, sino a una no menor cantidad de empresas “truchas“ que se autodenominan “compañías de redes de mercadeo” o a los fondos de inversion que se transforman finalmente en fraudes masivos como los que acabamos de vivir en nuestro país recientemente con la empresa AC Inversions.
Sin duda que las mentes oportunistas son condenables cuando de engañar a la gente se trata pero, ¿qué es lo que realmente nos mueve como seres humanos a caer una y otra vez frente a la “magia” de la promesa de una vida resuelta? ¿Por qué a pesar de las innumerables señales que podamos tener del universo en el sentido de ser cautos, a pesar de las advertencias de amigos y conocidos, seguimos cayendo?
Porque basta escuchar un testimonio de gran retorno para que nuestro cerebro generalice y genere una creencia en torno a que “esto si es serio”. Esa creencia nos fortalece, nos tranquiliza y nos da el coraje incluso de invitar a la gente que conocemos y que queremos, a acompañarnos en la sórdida aventura. No vemos los peligros, no vemos las advertencias ni hacemos caso a las señales. Sólo caemos en el hechizo y apostamos todo en aquello que creemos suplirá nuestras enormes carencias inconscientes, la profunda inseguridad frente a la vida y al destino y caemos rendidos ante a la poderosa oportunidad de finalmente “tener seguridad para nosotros mismos y nuestra familia”. Cuando el hechizo termina, vemos las cosas tal cual son, apelamos a nuestra valentía para ver la magnitud de los daños y partir muchas veces desde cero, recuperar las confianzas de aquellos que creyeron en nosotros, recuperar los vínculos incluso a veces con nuestras parejas y reinventar nuestra identidad pública, la cual la mayor parte de las veces, sale dañada.
Que difícil es poder aconsejar en este dominio de la ambición humana; solo debemos vivir la experiencia y ser capaces de entender cuál es el mensaje que la vida nos entrega con esta vivencia y aprender…una vez más.
Se me aparece una frase de uno de los genios de la PNL Richrad Bandler al despedir este news de hoy: “Los hombres inteligentes aprenden de sus errores, los hombres brillantes aprenden de los errores de los demas”
Feliz semana y la invitación es para este Miércoles a las 12:00 en nuestra Radio online en el programa VIDA TOP y a las 18:00 Hrs. con el gran Enric Corbera en Conversando en Positivo por la Radio Universidad de Chile, 102.5 FM