¿Has notado últimamente que te pones a la defensiva frente a opiniones diferentes a las tuyas, o buscas constantemente la aprobación de los demás o has hecho últimamente alarde de tu genialidad?
Si sientes que de alguna forma tus respuestas a alguna de estas preguntas son afirmativas, estás frente a poderosas señales que te indican que puedes ser presa del encanto de tu ego.
El enfrentar y controlar a esta compleja maquinaria mental y emocional puede traer beneficios insospechados a la hora de potenciar tu liderazgo, tu toma de decisiones o tus relaciones interpersonales. Por el contrario, si te dejas arrastrar por la irresistible fuerza de nuestro misterioso amigo, podemos impactar de manera irreversible los resultados de una decisión que puede conducir al infierno tu vida laboral e incluso tu vida personal.
La esencia del ego es el temor a la pérdida y su disfraz es la arrogancia.
La fuerza del ego puede transformar la seguridad en infalibilidad, la agilidad en apresuramiento, la agudeza en fricción, el control en rigidez, la perseverancia en resistencia al cambio, el encanto en manipulación, el poder en autocracia y la valentía en estupidez.
Como descubrir si estas siendo presa de tu ego y si tus decisiones se están volviendo peligrosas:
- Me enojo frente a posiciones distintas a las mías.
- Escucho para responder y no para comprender.
- Al justificar una posición exagero la información mas allá de su importancia o significado.
- Filtro solo aquello que valida mi pensamiento y experiencia.
- Descarto inconscientemente la información contraria a mi posición.
- Manipulo la información que me llega para apoyar o validar mi posición.
- Creo deliberadamente información que nunca existió.
- Busco que los demás aprueben mi postura y manipulo para lograr reconocimiento.
- Siento que los demás son inferiores a mi.