Revisar nuestro teléfono celular se ha convertido en el hábito más poderoso, quizá más que colocarse el cinturón de seguridad al ingresar a nuestro automóvil. La diferencia entre uno y otro hábito, es el impacto que tiene en el amor y dedicación que le damos a los que nos importan.
Las tecnologías no son buenas o malas en sí mismas, dependerá del uso que nosotros les demos. Si bien nos mantienen conectados con personas que están lejos (o a veces no tanto), pasa que al mismo tiempo nos desconectan de nuestro entorno. Dejamos de poner nuestra atención en lo que estamos haciendo, dejamos de tomar en cuenta a las personas con las que estamos interactuando en el momento, para poner nuestro foco en conversaciones virtuales.
Cuando estés con tu familia no pierdas de vista esto y no cometas el error de ignorarlos por contestar tu smartphone. Está atento a la comunicación en persona, en vivo, esa que nos entrega señales no verbales y que nos permite conocer al otro más allá de las palabras.
Aprovecha tus vacaciones para conectarte con tus hijos, con tu pareja y con el entorno circundante. Recuerda que la vida está llena de detalles maravillosos, que no están en una pantalla.
Vive el aquí y el ahora; concéntrate en el presente. No estés pensando siempre en lo que vendrá o que las vacaciones terminarán pronto. Vive cada día como si fuese el último y no te pierdas de conocer más acerca de quienes más quieres.
Disfruta de la naturaleza, de la playa, la montaña, el ruido del mar o de un río, y deja de lado por un rato tu teléfono, tus correos y preocupaciones, y concéntrate en las cosas importantes. Recuerda que las vacaciones son más que cambiar de un lugar físico, son también vacaciones mentales y que dependerá de de ti crear un ambiente positivo y de relajo. Que no se te olvide pasarlo bien…
– Desconéctate del mal humor y conéctate con la risa de tus hijos.
– Desconéctate si algo no salió como planificaste y conéctate con la aventura.
– Desconéctate de los correos y conéctate con las conversaciones amenas con los tuyos .
– Desconéctate del futuro y lleva todos tus sentidos al momento.
