Hace poco lanzamos un artículo respecto de cómo las reuniones suelen transformarse en una pérdida de tiempo, sin embargo, la solución no estaría en eliminarlas, sino en hacerlas más efectivas.
Para esto, lo que debemos tener claro es que una reunión siempre tiene como expectativa un resultado, si al finalizarla te encuentras con que no hay ninguno, tal vez estuviste una reunión, que nombraremos como “grasa”.
A continuación te presentamos 3 tipos de reuniones que suelen darse con mayor frecuencia en las organizaciones, identifícalas y evalúa en qué categoría sueles estar más a menudo:
Las reuniones grasas: Son aquellas en las cuales sentimos que no tenemos nada que hacer ahí o los objetivos nos están claros. En ellas reina la ambigüedad y suelen ser las que terminan sin tareas o acciones concretas a realizar.
Las reuniones necesarias: Reuniones periódicas de accountability, que suelen llevarse a cabo con el equipo, así como también las reuniones individuales que sirven para retroalimentar, resolver problemas o mitigarlos.
Las reuniones rentables: Son las que apuntan al logro de los objetivos del área o la organización, los mismos que están alineados a la estrategia de la empresa, como formar un equipo de trabajo, lanzar un proyecto, tomar decisiones estratégicas, entre otras cosas.
En definitiva, lo que hacemos en una reunión es conversar y la conversación es una herramienta de comunicación extraordinaria para llevar a cabo aquello que es necesario hacer. Pero, las conversaciones no siempre son efectivas, sobre todo cuando ni siquiera eres consciente de qué tipo de conversación estás teniendo. En este sentido, éstas se convierten en un arte, cuando nos damos cuenta que lo que hacemos todo el tiempo, es conversar.
A continuación te entregamos algunas preguntas de reflexión basadas en el “Diseño de Conversaciones” de Rafael Echeverría, que pueden permitirte distinguir desde qué espacio conversas:
¿Son expansivas mis conversaciones?
¿Son restrictivas?
¿Son efectivas?
¿Me interesa aportar?
¿Cuáles son las habilidades que necesito tener para conversar?